Entra el sol a la Plaza Mayor desde Obispo Valero e ilumina una franja de multitud, el resto queda en sombra, obligando a exprimir al máximo el rango dinámico de las cámaras para evitar quemar las altas luces de la fachada de las Petras y la Calle Pilares, y que la parte que pilla a contraluz no sea solo una mancha azulada y oscura que vocifera, que hace redoblar tambores y chirriar clarines. Estamos en Cuenca, es la mañana de Viernes Santo, y para más señas la Procesión Camino del Calvario.
Van subiendo las imágenes que componen la procesión y allí quedan, esperando pacientemente en la zona de la fuente mientras los de San Juan Evangelista se van abriendo paso, destacando entre turbos y espectadores con su oro, verde y grana y con la alta palma balanceándose al compás: "¡Que lo baile!
No sabía que la Plaza Mayor era capaz de albergar tal cantidad de personas, o no era consciente de ello, ni siquiera en los conciertos de San Mateo, y es que este año estamos en un lugar privilegiado que permite apreciar mejor la pasión que mueve la Semana Santa en Cuenca: El balcón del Ayuntamiento, que nos ofrece una perspectiva distinta, extraña, distante en contraste con la de otras veces en la Plaza del Salvador.
Una vez más, gracias al personal del Ayuntamiento de Cuenca: Aurora, Chema, Miguel Angel y a las técnicas de Turismo. Esta imagen formará parte de una 360º que se podrá ver próximamente en Woow 360 Cuenca.
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